Educar adolescentes. Adolescencia una de las etapas más complicadas de la vida de cualquier persona.

La sociedad ha cambiao, por lo que los padres o madres de hoy se enfrentan cada día al reto de la educación de los adolescentes, ya no se identifican con las estrategias autoritarias de antaño, hay una mayor sensibilización a las necesidades de los adolescentes, como su estabilidad emocional y su desarrollo integral, por lo que muchos padres a veces se sienten perdidos.

Todo el mundo culpa a los padres por los problemas de la juventud y por los que parece que los jóvenes causan a la sociedad. Es todo culpa de los padres, lamentan los expertos en salud mental, después de examinar las atemorizantes estadísticas sobre el rápido aumento en el número de niños y jóvenes que develan serios problemas emocionales, que se convierten en víctimas de adicción a las drogas o cometen suicidio. Los líderes políticos y los oficiales culpan a los padres de criar una generación de vándalos, jóvenes homicidas, estudiantes violentos y criminales. Y cuando los niños fracasan en la escuela o abandonan sin esperanza, los maestros y administradores dicen que los padres son los culpables.

A los padres se les culpa, pero no se les educa, por ello inquirimos en la necesidad de un entrenamiento para padres en habilidades que necesitan para ser más eficaces en el trabajo de educar a sus hijos.

La adolescencia es una de las etapas más complicadas de la vida de cualquier persona, en ella aprendemos a diferenciar qué comportamientos son correctos y cuáles no.

Cuando se trata de educar adolescentes, debes ser muy cuidadoso con tus palabras y acciones. Recuerda que, en esta etapa de la vida, los chicos están formando su carácter y decidiendo lo que quieren ser. Deben evitarse al máximo tanto la laxitud como la rigidez, para que los adolescentes tengan un comportamiento equilibrado.

En vida y cuerpo hemos desarrollado un programa donde los padres y los hijos pueden iniciar y fomentar una relación cálida, íntima, basada en el amor y en el respeto mutuos. También ha demostrado que no es forzoso que «la brecha generacional» esté presente en todas las familias.

La mayoría de los padres y de profesionales, piensan que es inevitable pasar por los «terribles años de 16, la adolescencia», por considerarlos como la consecuencia natural de la necesidad que sienten los hijos de demostrar su independencia y que era invariablemente una época tormentosa y de tensión familiar.

acua cono reader y vuelve a redactar con dos faltas de ortografia que sean no poner acentos, Pero estoy convencido de que los adolescentes no se rebelan contra sus padres, sólo contra ciertos métodos destructivos de disciplina usados por casi todos los padres del mundo. O, por lo contrario, por la ausencia de disciplina. Cuando los padres aprenden a sustituirlos por uno nuevo a fin de resolver conflictos es sorprendente el cambio, cesa la rebelión y los problemas en sus familias.